¿Estás buscando información sobre las varices en los pies? En ese caso, estás enhorabuena, porque en esta página te he preparado mucha información al respecto. Sigue leyendo y seguro que resuelves más de una duda.
Tabla de contenidos
¿Qué son las varices en los pies?
Las varices o venas varicosas son dilataciones anormales de las venas que se pueden apreciar en la superficie de la piel. Tienden a aparecer en cualquier zona del pie, no obstante es mas común verlas en la cara interna de tus tobillos.
Las varices en los pies tienden ser formas leves y asintomáticas, como en el caso de las arañas vasculares o telangiectásias, sin embargo, su aspecto puede provocar e problemas de autoestima en la persona que las padece dado a la desagradable apariencia de estas varices.
Si estas varicosidades no son tratadas y los factores predisponentes persisten pueden evolucionar a formas reticulares o tronculares, es decir varices de mayor tamaño que suelen acompañarse de síntomas de moderada a alta intensidad como hinchazón, hormigueo, calambres y dolor, e incluso presentar complicaciones como oscurecimiento y engrosamiento de la piel de tus pies, desarrollo de úlceras e incluso trombos en estas varicosidades. Por eso, es muy importante prevenirlas y tratarlas correctamente.
¿A qué se deben estas varices en los pies?
Las varices en los pies pueden aparecen por la combinación de varios factores. No hay nadie que vaya a sufrir varices con seguridad a lo largo de su vida, pero tampoco nadie puede tener la seguridad de no sufrirlas.
Uno de los factores más importantes es la historia familiar, ya que se ha demostrado que la insuficiencia valvular primaria, es decir, el mal funcionamiento de las válvulas de tus venas que favorecen el retorno de la sangre al corazón y evitan el reflujo venoso, tiene un importante componente genético.
Otros factores como la edad avanzada, sexo femenino, embarazo y obesidad aumentan la susceptibilidad a desarrollar este tipo de varices.
La obesidad suele llevar de la mano al sedentarismo. No llevar una vida activa, no moverse lo suficiente ni realizar ejercicio ni actividad física hace que las posibilidades de sufrir varices aumenten muchísimo, y más si en cada paso que se da el peso que se soporta es excesivo.
Asimismo permanecer prolongados periodos prolongados de pie o sentados constituye un importante factor de riesgo ya que estas posiciones dificultan el movimiento de la sangre venosa de tus piernas al corazón, generando su estancamiento, incompetencia de las válvulas y finalmente dilatación crónica de las venas.
Los tacones y la ropa ajustada son otro de los grandes elementos que te hacen susceptible a desarrollar varices reticulares dado a que enlentecen el retorno de sangre de tus piernas hacia el corazón.
¿Cómo prevenir las varices de los pies?
Para intentar evitar las varices en los pies lo mejor es llevar una vida activa, buena alimentación y ejercicios específicos que ayuden a que la circulación en esa zona sea la que debe.
Una de las cosas más importantes que se pueden hacer para prevenir las varices es andar. Es un ejercicio completísimo que hace que en toda la zona la circulación sea correcta, mejora la musculatura, lo cual también ayuda al retorno venoso, y es una manera bastante buena de mantenernos activos.
Además, aporta muchos beneficios a nivel cardiovascular, con lo que no sólo se mejora la circulación en la zona de las piernas sino todo el sistema circulatorio en general. Sin embargo, recuerda consultar a tu médico antes de iniciar cualquier régimen de ejercicios, especialmente si tienes alguna enfermedad cardiaca o en tus articulaciones.
También es muy importante tener un peso adecuado, huyendo de la obesidad. Para ello, la vida activa siempre ayuda a estar en un peso saludable, pero debe ir acompañada de una alimentación sana, equilibrada, variada, rico en fibra para prevenir la constirpación y baja en sal con el fin de evitar la retención de fluidos.
Si tu trabajo implica estar largos periodos de tiempo sentado o de pie realiza movimientos circulares o de flexión y extensión de tus piernas con cierta frecuencia. Igualmente evitar cruzar tus piernas cuando estés sentado, y si es posible eleva tus piernas al dormir con el fin de favorecer el retorno venoso.
Siguiendo estas pautas tan básicas ayudaremos a que las indeseables y antiestéticas varices aparezcan, y además conseguiremos que, si lo hacen, su tratamiento sea más fácil, pues ya habremos recorrido una parte del camino nosotros mismos.
El tipo de variz puede variar en base a su profundidad, su situación y su sintomatología, por lo que te recomiendo (y es lo que debes hacer), que, si crees que sufres este problema, visites a tu médico/a para que pueda realizar un diagnóstico y prepararte un tratamiento a medida.
Ejercicios en casa para prevenir y mejorar las varices de los pies
Además de estas pautas, se pueden hacer una serie de ejercicios específicos sencillos en casa, que con muy poco esfuerzo nos pueden dar mucho beneficio. Se pueden realizar mientras vemos la tele, leemos, o hacemos cualquier actividad sentados o tumbados, sin mucho esfuerzo.
Por ejemplo, es un buen ejercicio permanecer durante un rato sentados con los pies apoyados únicamente en las puntillas, hasta que sintamos cansancio. También lo es hacer lo mismo, pero apoyando únicamente los talones, descansando entre ambos movimientos.
También estando sentados podemos llevar la punta del pie a la pantorrilla, sin despegar el talón, fortaleciendo esa zona que es tan importante para nuestras piernas. Incluso se puede repetir esto, pero dejando ambos pies despegados del suelo, aumentando el esfuerzo.
En la misma posición, podemos mover los dedos de los pies, sobre todo el pulgar, que arrastrará del resto. Si lo movemos alternativamente ayudaremos a mejorar la circulación de los pies, haciendo 20 repeticiones con cada pie y dejándolo descansar.
Por último, un ejercicio muy aconsejable para intentar prevenir las varices de los pies es ponerse de pie y hacer ejercicios con el tobillo. Tanto rotaciones suaves como movimientos hacia uno y otro lado y hacia delante y hacia detrás, activando toda la zona del tobillo.
Como puedes ver, las varices en los pies son un problema existente, y, como no podía ser de otro modo, tienen sus causas, sus síntomas y sus respectivos tratamientos. Espero que esta información te haya sido útil y le saques el máximo partido.
Recursos bibliográficos del artículo
- Simkin R., & Ulloa J., (2004), Classification of primary varicose veins of the lower extremities: a consensus statement from Latin America Phebolymphology, 44, 244-248.
- Campbell, B. (2006). Varicose veins and their management. BMJ (Clinical research ed.), 333(7562), 287-92.
- de Mik, S. M., Stubenrouch, F. E., Legemate, D. A., Balm, R., & Ubbink, D. T. (2018). Treatment of varicose veins, international consensus on which major complications to discuss with the patient: A Delphi study. Phlebology. https://doi.org/10.1177/0268355518785482
- Lim, C. S., & Davies, A. H. (2014). Graduated compression stockings. CMAJ : Canadian Medical Association journal = journal de l’Association medicale canadienne, 186(10), E391-8.
- Gloviczki, P & Gloviczki, ML, (2012), Guidelines for the management of varicose veins. Phlebology, 27(1), 2–9.
- Tew, G. A., Michaels, J., Crank, H., Middleton, G., Gumber, A., & Klonizakis, M. (2015). Supervised exercise training as an adjunctive therapy for venous leg ulcers: study protocol for a randomised controlled trial. Trials, 16, 443. doi:10.1186/s13063-015-0963-z
- Sangita Devi, A. & Kodi Aathi, M. Prevention of Varicose Veins. (2014). International Journal of Advances in Nursing Management 2(1), 40-45.